Feligreses de la Parroquia de San Juan Pablo II han recorrido el Camino Portugués hasta la tumba del Apóstol Santiago. 117 personas ―entre niños, jóvenes y adultos― han formado parte de esta nueva peregrinación parroquial organizada dentro del Año Jubilar ‘Peregrinos de la Esperanza‘.
La misa de envío fue presidida por el párroco de San Juan Pablo II, D. Adrián Ríos, en el templo parroquial, la tarde del lunes 18 de agosto. El recorrido de las distintas etapas desde Baiona hasta Santiago se inició el miércoles 20 hasta el lunes 25 de agosto, en el que las familias transitaron las Rías Bajas de Galicia, que en Pontevedra se desvía hacia la Ría de Arousa. El llamado Camino Espiritual hace entrada en Padrón a bordo de un barco, como cuenta la tradición que hicieron los discípulos de Santiago con su cuerpo inerte para enterrarlo en Compostela.
Cada etapa se iniciaba con una reflexión guiada sobre la esperanza cristiana que, a su vez, propiciaba el silencio grupal la primera hora de recorrido. Seguía el rezo del Ángelus y el santo rosario. Antes de la celebración eucarística, los peregrinos celebraban un encuentro catequético. El párroco presidía la Eucaristía diaria en las parroquias de los pueblos donde estaba previsto el alojamiento. Al Camino de Santiago Parroquial acudieron también los seminaristas Javier Garrido y Antonio Arceda. Las misas eran acompañadas musicalmente por miembros del coro parroquial.
La misa en la Catedral de Santiago tuvo lugar el martes 26. La celebración litúrgica finalizó con la invocación al Apóstol, en la que rogaron “por los frutos apostólicos de la misión evangelizadora”.
D. Adrián ha destacado como momentos estelares del Camino de Santiago 2025, “las confesiones permanentes de los peregrinos durante el camino, la participación en el concierto espiritual vespertino en Santa María de Pontevedra, los baños refrescantes en las playas de la ría de Vigo, la misa en la parroquia de Padrón junto a otro grupo de jóvenes sevillanos que acompañaba el sacerdote Luis María Jiménez de Cisneros, así como la Eucaristía el día de llegada a Santiago, en el Monasterio de Santa Clara, por todos los difuntos familiares o amigos de los peregrinos, el rosario con testimonios que hicimos en el Monasterio de Armenteira y el rezo de Sexta con la comunidad de monjas cistercienses”.
Finalmente ha agradecido al matrimonio de Sonia Blanco y Gonzalo Fernández la organización de esta peregrinación, que forma parte de las actividades previstas por la Parroquia para ganar Indulgencia Plenaria.
Los feligreses de San Juan Pablo II quisieran obsequiar a la Parroquia con un incensario con forma de botafumeiro como recuerdo de esta peregrinación jubilar.