Leticia Rueda: “A través de la oración voy fortaleciendo mi relación con Dios”

“A través de la oración voy fortaleciendo mi relación con Dios”

Leticia Rueda está casada, es madre de dos hijas y actualmente pertenece al grupo de Oración de Madres y al Proyecto Amor Conyugal junto a su marido Jorge.

Para ella los pilares fundamentales para poder vivir bien la fe son:

  • La Sagrada Escritura. Aquí es donde Dios me habla a través de su palabra a mi vida personal. Es una forma importantísima de acercarme a Dios y conocerlo cada día un poquito más. Es abrirle los oídos y el corazón a lo que Él tiene que decirme.
  • La oración: A través de la oración voy fortaleciendo mi relación con Dios. Es precioso ver como se entabla ese diálogo de amor a través de la meditación de su Palabra y de la oración personal.
  • Los sacramentos. Son regalos que Dios nos ha dado a través de la Iglesia para que podamos seguir unidos a él e ir santificándonos cada día un poquito más.
  • Compartir la fe, llevarla a la vida práctica. Creo que es importantísimo que compartamos la fe con otras personas, bien sea a través de algún apostolado, de una comunidad cristiana, en un grupo parroquial, en acompañamiento espiritual, etc. Yo creo que Dios pone en nuestro camino, personas y acontecimientos que pueden ser luz en nuestra vida.

Reflexiona que “nosotros tenemos que llenarnos para poder dar a otras personas, no se puede dar lo que no se tiene. A veces lo que otros hermanos te pueden aportar son regalos inmensos, perlas preciosas, que nos hacen crecer espiritualmente e iluminan nuestro camino”.

Fortalecer el encuentro con Jesús Resucitado

“Creo que es importantísimo el encuentro personal con Cristo. Para mí ha sido algo decisivo. Ha sido como bajar al corazón todo lo que tenía abstracto en la cabeza, y es así como todo ha empezado a tener sentido. Es una experiencia que te cambia la vida. Se ven las cosas de forma diferente y ese cambio interior que se produce en ti, comienza a hacerse visible también exteriormente a través de la vida diaria. Es algo experiencial, cada persona lo vive de forma diferente, pero lo importante es tener ese encuentro e ir fortaleciéndolo después día a día”.

“No tengáis miedo”

San Juan Pablo II decía: “No tengáis miedo. Abrirle las puertas a Cristo”. Eso es lo que yo les diría. a las persona que aún están indecisas en acercarse a Dios. “Él es puro amor. Jesús lo único que quiere es salvarte, hacer una obra maravillosa en ti, en cada uno de nosotros”.

“Todo junto al Señor se vive de otra manera, tanto las dificultades y el sufrimiento como la alegría. Así es como yo lo he experimentado en mi vida personal. Yo he caminado de las dos maneras, sin Él y junto a Él. Y lo tengo claro: Quiero caminar junto a Jesús. Yo no quiero vivir la vida sin Él. Quiero andar agarrada a su mano y a la mano de la Virgen María, que con su inmensa dulzura y amor, intercede por cada uno de nosotros para llevarnos hasta su Hijo.

Yo les recomendaría que abrieran su corazón, tuvieran una actitud abierta, dejando de lado las predisposiciones y prejuicios que muchas veces tenemos. Es dejarse llevar, abrirle una puerta a Cristo, para que Él pueda empezar a obrar en nuestras vidas. Quizás empezando a ir a misa, a la parroquia, leyendo los evangelios, algún libro espiritual, asistiendo a un retiro… Jesús llama de muchas formas diferentes… Nosotros solo tenemos que dejarnos llevar y no cerrarle la entrada.

A veces nosotros mismos nos auto limitamos por la falta de tiempo, el estrés de la vida diaria, nuestras ideas cerradas de las cosas… Y es maravilloso cuando, a pesar de las dificultades que cada uno tenemos en nuestras vidas, decidimos comenzar a buscarle y abrirle esa puerta… Creo que muchos se sorprenderían del gran regalo que les espera”.

Jerez de la Frontera (1974).
Profesora de Highlands School Sevilla

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